Es bien sabido, que en nuestros países, de gobiernos capitalistas que aplican el obsoleto modelo neo liberal, modelo que está acabando con la especie humana, la costumbre de contratar jóvenes inexpertos que trabajen largas jornadas por un salario mínimo, es algo común. Los gobernantes violan las leyes continuamente y desmontan aquellas que reivindican a la clase trabajadora. Hoy por hoy, la mayoría de jóvenes terminan sus estudios sin ningún incentivo de empleo serio. Los conocimientos adquiridos, hacen parte de un mar de conocimientos de un centímetro de profundidad, por lo cual no es raro que terminen en el mercado laboral informal, se incorporen al ejército de desempleados o integren bandas delincuenciales.
En este sentido, los ciudadanos llegan a ser mendigos en su propia patria, desplazados, sin alas y sin sueños. Los niños, las mujeres y los ancianos son las principales víctimas de estos sistemas