Tigre inmemorial de mil y un atardeceres
Guarda en su memoria genética las ratas,
Roedores gigantes de otros tiempos
La selva con su aire se refleja
En el espejo antiguo de sus ojos
Azules como el color azul del mar
Mientras su termostato
Mide con suma precisión
Y equilibra el misterio
De su fiebre de gato
Me pregunto si acaso
Algún atardecer inmemorial,
Quizá la guerra eterna y su fracaso
Estén grabados, como en un metal,
En el espejo antiguo de sus ojos
Azules, tan azules, como el mar…